Cáritas celebró Día Mundial del Refugiado

Con la realización de una jornada médica integral, dedicada a la Población en Necesidad de Protección Internacional, PNPI, residente en Caracas, Cáritas de Venezuela celebró el Día Mundial del Refugiado, el cual se conmemoró este lunes 20 de junio.

La actividad, llevada a cabo el sábado 18, en las instalaciones de la Universidad Católica Andrés Bello, ofreció 273 servicios de salud, que incluyeron evaluación nutricional, oftalmológica, charlas sobre prevención de cáncer de mama, así como también consultas de medicina general, pediátrica y ginecológica.

Los servicios de atención médica y recreativa brindada a los solicitantes de refugio, y refugiados, que se encuentran en nuestro país; se prestaron gracias a la solidaridad de fundaciones sensibilizadas en el tema, como Fundación Sánitas y Optisánitas de Venezuela, Senos Ayuda, Nestlé, Pepsico Alimentos y Fundafarmacia;  así como a la participación de jóvenes voluntarios del Colegio Champagnat de Caracas; y a la permanente colaboración del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, ACNUR, y de HIAS, la Oficina de Ayuda al Inmigrante Hebreo.

Cáritas de Venezuela celebró esta actividad privada con los refugiados, como parte de su acción social en el área de Movilidad Humana, la cual desarrolla en cinco oficinas a nivel nacional: Maracaibo, Machiques, San Cristóbal, Guasdualito, y Caracas. Como se conoce, un refugiado es toda aquella persona que debido a fundados temores de ser perseguida por motivos de raza, religión, nacionalidad, pertenencia a determinado grupo social u opinión política, se encuentra fuera del país de su nacionalidad y no puede, o a causa de dichos términos, no quiere acogerse a la protección de tal país.

Según el ACNUR, en nuestro país hay 200 mil personas con tal condición, y habría más de 43 millones de desplazados en el mundo. Paradójicamente, no es a Europa a donde migran esos grandes grupos humanos, sino a los países en vías de desarrollo, como Venezuela. Ante esta realidad, Cáritas seguirá en la frontera, donde se dedica a brindar atención humanitaria de emergencia, orientación laboral y psicológica; y sobre todo, a ofrecer ese contacto cercano y afectivo, que fortalece la esperanza aún y en esas personas que a veces creen haberlo perdido todo, incluso la fe.

Fuente: Cáritas de Venezuela